martes, 24 de julio de 2012

El día que Marcos estuvo por Barcelona


Una tarde de verano... es lunes y estamos a mediados de julio. Unas cincuenta personas se dan cita, en la ciudad condal, para compartir vivencias entorno a Marcos siguiendo las hormas del libro "Hay otro mundo y está en éste".
Desde el inicio se respira un clima de familia, justamente la idea de presentar el libro en Barcelona nació porque la familia Cerviño estaba pasando unos días cerca de la ciudad.
La hora y media que compartimos pareció volar, quizá porque a medida que pasaban los minutos crecía la emoción y la alegría que el recuerdo de Marcos nos transmitía.
Unas vivencias que a su vez despiertan nuevos horizontes, basta leer lo que nos escribió Elisa Escudero como resumen de esa tarde de verano...

«Habiendo leído el libro y escuchado ayer a su padre Ramón, me quedé pensando en la libertad y el respeto profundo que tanto él, como Quela, tenían hacia su hijo. Los que somos papás de jóvenes en "ebullición" nos resulta muy fácil, a veces, esgrimiendo argumentos tales como, pensar en el futuro, no perder el tiempo, 20 años se tiene una sola vez en la vida, etc. "encaminar" lo más prontamente posible, las actividades, los estudios y todo aquello que garantice a nuestros hijos el poder defenderse en la vida. A veces, y esto desde el amor más grande que nos nace hacia ellos, no nos damos cuenta que todo es mucho más sencillo de lo que lo pensamos. Se trata de confiar en que Dios es quien realmente está habilitado para delinear ese devenir. Marcos, en sus comentarios, en sus cartas, en sus conversaciones con los demás, se muestra como un chico despreocupado del "qué dirán". Me impresiona como alguien que no "anda buscando caerle bien a nadie". En cambio sí es perseverante y constante en su búsqueda personal del sentido de la vida. A esa búsqueda la lleva a cabo a su manera y en los momentos que le nace hacerla. Su apertura mental, desprejuiciada y libre, le permiten comunicar con toda libertad a sus amigos, padres y personas en general, lo que está sintiendo y lo que está buscando. Esto lo puede hacer porque se siente básicamente respetado y querido. Él les pregunta y sus padres le sugieren algunos caminos alternativos para evitar "declararse a la deriva". Luego, está claro que Dios ha hecho el resto y Marcos ha confiado, quizá sin darse cuenta, del inmenso amor del eterno Padre para con él. Moraleja: Debemos movernos en la vida sin miedos tontos, confiados, seguros, como Marcos, que Dios está en todas partes y también, por supuesto, en nosotros mismos. Debemos estar tranquilos y orgullosos de ser como somos y hacer lo que sentimos, desde ese impulso natural y puro, que nos empuja hacia adelante para hacer lo que creemos que debemos hacer, porque en ese impulso se manifiesta la voluntad del padre en cada uno de nosotros. En fin que es una experiencia maravillosa la de Marcos, que nos insta a confiar en la presencia de Dios dentro  nuestro y ha dejarnos de tantas palabras para pasar a los hechos. Muchas gracias por invitarme a la presentación del libro».


Agradecemos, de forma especial, a la asociación CONVIVIM por su disponibilidad al permitirnos realizar la presentación en su sede.

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